Wiki The Legend of Zelda Fanon
Registrarse
Advertisement
Logo The Legend of Sergio

Los monstruos habían entrado en Ciudad Reloj sembrando el pánico entre sus habitantes. Sin embargo, una mujer que llevaba un bebé en brazos logró escapar de la ciudad, pero tenía una herida mortal en el abdomen. Entonces se encontró con alguien que conocía bastante bien.

Padre de Cremia: ¡Señora! ¿Qué le ha ocurrido?

Mujer: Me han herido de muerte... Quiero pedirle un favor.

Padre de Cremia: Claro, lo que sea.

Mujer: ¿Podría cuidar de mi hijo? Yo no voy... a poder hacerlo...

Padre de Cremia: Claro, cuente conmigo.

Mujer: Muchas gracias... (Le entrega el bebé) Se llama Sergio... Cuídelo bien... por favor...

La mujer se desploma y muere.

Padre de Cremia: Lo haré, no se preocupe.

Cuando el padre de Cremia llegó al Rancho Romani...

Cremia: Hola papá. ¿Qué traes ahí?

Padre de Cremia: ¿Te acuerdas de esa mujer que era amiga mía?

Cremia: Si.

Padre de Cremia: Antes de morir me pidió que cuidara de su hijo, y le he dicho que si.

Cremia: ¿Esa señora ha muerto?

Padre de Cremia: Si, hija. Desgraciadamente si.

Cremia se abrazó a su padre y comenzó a llorar.

Cremia: ¿Y no se puede hacer nada por ella?

Padre de Cremia: Lo único que podemos hacer es cuidar de su hijo. ¿Me ayudarás?

Cremia (secándose las lágrimas): Claro, papá.


5 años después...

La familia del rancho estaba dando un paseo por el campo de Termina.

Sergio: ¡Guau, este campo es enorme!

Padre de Cremia: Esto es el campo de Termina. Como tú bien dices es enorme, asi que no te separes de nosotros o te perderás.

Sergio: Vale.

Sergio se giró hacia atrás y vio algo que le dio curiosidad.

Sergio (pensando): ¿Qué es eso de ahí?

Y se metió en una zona donde había árboles.

Sergio: ¿Qué sitio será este?

De repente, frente a él apareció un lobo salvaje.

Sergio: ¡Ahhhhh,un lobo!

El lobo se acercó lentamente a Sergio mientras trataba de huir.

Sergio: Por favor, no te acerques.

De repente el lobo se abalanzó sobre él y le arañó en el ojo derecho, pero como lo cerró a tiempo sólo le hizo una cicatriz.

Sergio logró librarse del lobo, pero vinieron más a ayudarle. Cuando iban a atacarle cerró los ojos.

Sergio: ¡No quiero morir!

Sin embargo, cuando los abrió vio a un tipo de blanco encapuchado y con una espada blanca.

???: ¿Estás bien, chico?

Sergio: S-Si.

Volviendo al campo...

Romani: Este sitio es precioso.

Padre de Cremia: Si, y espero que siga así durante mucho tiempo.

Cremia: Oye papá, ¿has visto a Sergio?

Padre de Cremia: No, no le he visto.

Romani: Yo tampoco le he visto, hermana.

Cremia: Para mí que se ha perdido.

Padre de Cremia: ¡Santo cielo! ¿No se habrá metido en...?

El padre de Cremia salió corriendo hacia la zona de árboles.

Cremia: Papá, ¿adónde vas?

Volviendo al bosque...

???: ¿Por qué has entrado aquí? Este lugar es muy peligroso para un niño como tú.

Sergio: Lo vi de lejos y sentí curiosidad, eso es todo.

???: No es malo ser curioso, pero no vuelvas por aquí. ¿Qué te habría pasado de no ser por mí?

Sergio: Yo... Lo siento.

???: No te disculpes conmigo, sino con tu padre. Ahora debo irme.

Sergio: Muchas gracias por salvarme, señor.

???: No hay de qué. Cuídate chico.

El hombre misterioso chasqueó los dedos y despareció entre humo.

Sergio: ¿Quién sería ese tipo?

Padre de Cremia: ¡Sergio!

Sergio: ¡Papá!

Padre de Cremia (enfadado): Te dije que no te alejaras de nosotros. ¿Sabes lo preocupados que estábamos? ¡Creíamos que te habían hecho daño!

Sergio (llorando): Lo siento mucho papá.

Padre de Cremia: Bueno, tranquilo, lo importante es que estás bien. Ahora volvamos a casa.

Sergio: De acuerdo.

Continuará...

Advertisement